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15/09/2017

Pequeñeces (6)

El Diccionario Geográfico-Histórico de España, que comprende el Reyno de Navarra, Señorío de Vizcaya, y Provincias de Álava y Guipúzcoa, publicado por la Real Academia de la Historia el año de 1802, entre otras cosas dice que parece que en el apeo de 1366 lo que hoy denominamos Nazar se llamaba San Pedro y tenía entonces dos fuegos pudientes. No he querido poner esto donde le correspondía para no hacer el capítulo excesivamente largo y especialmente para no confundir a los lectores, pues lo que está claro es que ya en el siglo XII aparece en los documentos como Naçar, Nasar, Nasarre (también en otro momento expondré los documentos sobre Nazar del Archivo ´General de Navarra ya publicados).

Lo recogido en el Diccionario Geográfico-Histórico me viene muy bien para defender la teoría de que Nazar proviene del término en euskera de Donazar, santo viejo, ¿y qué santo más viejo que San Pedro? Es fácil que durante siglos se usase el nombre en euskera (Donazar) y con el tiempo pasase a denominarse también San Pedro, aunque también puede ocurrir que hubiese alguna otra población cercana ya desaparecida que se denominase San Pedro. Los despoblados en la zona son muy corrientes, Estemblo, Disiñana, Burguillo y hasta el mismo Cábrega.

Pero ahora nos toca hablar del Odrón. Los mapas dicen que el río Odrón, afluente del Ebro, nace en Nazar (aunque en Otiñano dicen que no, que ese mapa es erróneo y que el río Odrón es otro, un río paralelo que nace y trascurre por el término de Otiñano), según este mapa y también algún libro que he consultado al río Odrón lo hacen nacer en la Parzonería de Mataverde, y como es a Nazar al que le corresponde la presidencia vitalicia (a finales del siglo XIX, allá por 1890 se declaró un incendio en estos terrenos y tan solo acudieron a apagarlo los nazarenos, aunque también cuentan las malas lenguas que el incendio había sido provocado por el alcalde de Nazar) es lógico que los libros den como lugar de nacimiento a Nazar.

Se trata de un riachuelo, con un caudal escaso, los últimos veranos no es extraño verlo casi seco; sin embargo de gran importancia estratégica para el valle, pues ha hecho posible la existencia de varios molinos, huertas y dónde hemos cogido cientos de cangrejos, berros y alguna que otra rata de agua. Su curso corre por términos sin habitar, atravesando los campos de Nazar, Otiñano, Mirafuentes, Ubago, Sorlada. Sin embargo tanto en Mues, como en Los Arcos pasa por medio del pueblo.  

En la gran crecida de enero de 2015 por su paso por Los Arcos murió ahogado un hombre de 70 años al quedar atrapado en la furgoneta que había caído al cauce.

Por el pueblo, por Nazar no pasa río, ni riachuelo alguno, hace unos años atravesaba las calles un redajo, visible tan solo en la Picota, dónde competíamos por hacernos un espacio los chiquillos y los cerdos sueltos que iban a revolcarse entre el fango. El lugar dónde pasábamos las horas era la fuente, el abrevadero y los pozos de lavar la ropa.

El agua corriente y la luz eléctrica llegaron a las casas unos pocos años antes de que yo naciera. Pocas casas tenían más de dos bombillas, y menos todavía las que contaban con baño; por aquellos años la electricidad se pagaba según el número de bombillas que se instalaban y también por los kilovatios consumidos.

El agua era un bien muy preciado. La fuente cuenta con dos caños para consumo humano, un pilón para abrevadero de los animales, un pozo para lavar la ropa, y por fin el agua no consumida se recogía en otro pozo para regar las huertas. El agua ha sido y es un bien muy valiaso y estimado.

Nazar villa de abolengo, hoy venida a menos, 45 vecinos estamos empadronados, aunque todavía conservamos ayuntamiento propio. Todavía hoy vamos por el mundo como vecinos de la villa de Nazar, comparándonos por lo menos en el título con la ilustre villa de Bilbao.

El terreno agrícola más estimado y con mejores cualidades cercano al pueblo sigue denominándose La Villa.

Existe en Zamora muy cerca de Benavente la población de Villanázar, con acento en la segunda a. No hace mucho me puse en contacto con la alcaldesa de dicha localidad, Margarita Anta, la cual me acogió de buen agrado visitando los pueblos de Villanázar y Mózar. Convencido estoy que el fundador de Villanázar allá por los siglos XII o XIII era un nazareno que emigró hacia tierras castellanas en busca de un futuro más próspero, que sin duda lo logró.

Estas tierras arrebatadas a los moros se quedaron despobladas por lo que se tuvo que echar mano de gentes del norte. Muchos fueron los segundones que aprovecharon esta oportunidad. Le comenté todo esto a la alcaldesa de Villanázar y Mózar, aunque no creo que se quedase muy convencida, y tampoco creo que le hiciese una ilusión especial pensar que sus ancestros proceden de pobladores vascos.

Sin embargo por extraño que pueda parecer no es nada ilógico que Villanázar fuese fundada por un nazareno, veamos lo que ocurre con Espinosa de los Monteros, y esto sí que está probado históricamente. Espinosa de los Monteros es una población de Burgos que limita con Cantabria. Dos vecinos del Valle de la Berrueza, no sabemos el pueblo concreto, Martín Ruiz de Berrueza y su hermano allá por el siglo XI refundaron Espinosa de los Monteros. Alfonso VI de Asturias una vez expulsados los árabes dio permiso a los hermanos Ruiz para poblar la zona y es así como Martín fundó y repobló seguramente con gentes de La Berrueza el barrio alto de Espinosa y le denominó Berrueza.

Igualmente tenemos otro caso en el que estamos investigando, se trata de Gabriel Acedo de La Berrueza, que sabemos que nació a finales del siglo XVI en Jarandilla de la Vera, provincia de Cáceres, sacerdote, poeta y escritor, el cual dejó un libro impreso que lo dedicó a su familiar cercano, Diego de Acedo seguramente tío o abuelo, propietario del palacio de Acedo. Gabriel como buen emigrante añadió Berrueza al apellido para reivindicar la procedencia noble y también para que con el tiempo se supiese de que familia procedía, algo que por desgracia no hizo o no nos ha llegado el fundador de Mózar y Villanázar.

En cuanto al acento de Villanázar, en Nazar, no lo lleva; pero por mucho que nos pese a los actuales nazarenos, no es extraño que esta forma de pronunciarlo no sea la que fue hace cuatro o cinco siglos; pues tan solo se pronuncia Nazar en la zona de la Berrueza, vayas dónde vayas, siempre dirán Názar.