26/11/2006
Iruña-Veleia (II)
Atentos. Voy a cambiar las fotos.
Desde el primer día que oí la noticia de que se habían encontrado una gran cantidad de trozos de arcilla con unas inscripciones con textos en vasco en las excavaciones de una ciudad romana a unos kilómetros de Gasteiz (Vitoria) me vinieron a la cabeza una serie de ideas que no he tenido tiempo de ponerlas en público, como no me atrevo a hacerlo en la prensa tradicional me vais a perdonar que lo haga en este blog.
Los textos son del siglo III después de Cristo. Como casi seguro que habréis oído existen dudas de su auténticidad. Es más últimamente se están haciendo públicas las dudas de varios catedrátidos, de intelectuales, y de varios investigadores.
Sin embargo, yo, sin querer meterme de lleno en camisa de once varas, en un tema que no me incumbe en especial me hago una serie de preguntas. Si nunca hasta ahora se habían puesto en duda los hallazgos de las excavaciones arqueológicas, ya que es preciso tener en cuenta que este tipo de excavaciones cuentan con una serie de criterios científicos, como son el carbono 14, la seguridad de la estratificación por capas, y otros muchos que obvio. ¿A qué se debe este revuelo en este momento? ¿Simplemente porque aparecen unos textos en vasco? Sí es verdad que lo escrito es chocante. También para mí.
De todas maneras, esta es mi argumentación. A mí el pasado del euskera no me sorprende, es más no me preocupa ni un ápice. Lo único que tengo claro, es que el vasco fue una lengua que se habló con naturalidad en una zona que parece que fue bastante más extensa que la actual, y que era la lengua natural de los vascos. Por tanto no me sorprende nada en absoluto este tipo de hallazgos, si que se debe y se puede estudiar lo que ha aparecido. Lo que me preocupa, por el contrario es el futuro del euskera, que no está nada claro que vaya a sobrevivir. En definitiva, esta es la pregunta que yo me hago. Si la existencia del euskera en la época romana, si todos estamos de acuerdo en que el euskera era la lengua natural, normal y la que se hablaba en todo el territorio, qué interés pueden tener los responsables de esta excavación en falsearla. ¿Qué puede, qué tiene que ganar el euskera en este asunto? Nada
El escepticismo del pueblo lo entiendo de primera. A ver si este ejemplo puede aclarar algo. Todavía hoy si preguntamos en Nazar, a los habitantes por el origen de los apellidos vascos -Atxa, Montoia, Landa, Legardon, Ibarrola, Lander, Zudaire, Bujanda, Morras, Lakalle, Etxeberria, Luzuriaga...- la mayoría puede pensar que son originarios de Gipuzkoa, Araba o de la conchinchina. Pero la realidad es que son apellidos de estos valles, desde siempre, no hay más que ver los libros parroquiales para ver que estos apellidos son originarios de los pueblos de este valle.
Moraleja: si no existiesen los libros parroquiales quién de nuestros pueblos, después de que el euskera desapareciese hace 500 años iba a pensar que estos apellidos son originarios de aquí. (Lo he escrito un poco atropellado, y sin el tiempo suficiente, pero creo que se entiende la idea)
Joarkide
13:20 | Permalink | Comentarios (0)
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