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31/05/2007

Urna podrida

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cOMO hijo de navarro y con vivienda en Sorlada, donde disfruto varios meses al año, me veo en la obligación de intervenir para contar parte de una ópera bufa sobre la urna podrida que se ha representado en un pueblo que quiero. Al igual que otrora, alguien ordena empadronar poco antes de las elecciones municipales a dieciséis ciudadanos europeos -por lo tanto, con derecho a voto-, con el fin -consumado, si las autoridades competentes no lo impiden- de dar un vuelco a las mismas. Pues bien, cuando genéricamente somos acusados de racistas, debemos aclarar que nada nos predispone en contra de ninguna opción sexual, etnia, confesión y opinión política (todas las personas somos respetables, al contrario que ciertas prácticas), sino contra los malos usos electorales y las formas antidemocráticas. Es decir, nada en absoluto que objetar a los flamantes vecinos -vengan de donde vengan, faltaría plus -, sino contra las tretas caciquiles .

Así es, afortunadamente, un ciudadano/a, un voto (junto con los derechos y obligaciones correspondientes). Pero, ¿dónde moran los dieciséis (sólo tenemos noticias de cuatro) ciudadanos rumanos empadronados? ¿En qué condiciones sociales y laborales? Aunque sea privativo de su conciencia, ¿son conscientes del papel de su voto? (Yo y mis amigos, desde luego, no solemos coincidir con el amo/patrón... aunque es muy majo y paterna-lista). El día de las elecciones sentí vergüenza, mucha tristeza. Mi padre, natural de Legaria, en la encantada Valdega, me enseñó algunas cosas: a ser -como la mujer del César- persona íntegra y de palabra, un ciudadano honrado, digno y libre. A los amigos de SOS Racismo y de la FAIN mi aliento (adelante en las denuncias contra las precarias condiciones de vivienda y hacinamiento, la explotación y la xenofobia...), pero conviene recordar que -como los periodistas rigurosos, entre los que me gustaría incluirme- las fuentes se cotejan y contrastan. Si me permiten la broma: ¿qué ha sido: un par de zapatos como en la villa de Corleone o un bocadillo de chistorra ? (Si se tratara de tongo, en las próximas elecciones me pido el jamón). Conste que este servidor ni quita ni pone y tampoco defiende a ningún señor o interés bastardo; por cierto, no ofende quien quiere sino quien puede. Mi verdad, en Sorlada no huele a racismo, canta - con permiso de Medio Ambiente y para desgracia del valle y el venerable Gregorio- a presunto pucherazo con hedor a cocho, cuto, puerco, marrano, gorrín... (y también) cerdo.

Ángel Martínez Salazar

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