Berrotza / Berrueza

Que Navarra es vasca no ha sido puesto nunca en duda hasta hace unas décadas. El creador de eta teoría,  no ha sido otro que el Gobierno  de Navarra, el cual ha intentado separar a Navarra de todo lo vasco; dándose de bruces una y otra vez contra la realidad de la sociedad navarra. Sin embargo, fuera de Navarra si que ha calado esta idea repetida machaconamente; pero como  verdaderamente las habas se cuecen en Navarra y no fuera, con el tiempo los seguidores de esta tesisn tienen todas las de perder.  

Es hacia 1990, es decir hace cuatro días,  cuando UPN y PSN, basándose en la existencia de dos Comunidades Autónomas diferenciadas, y con nombres distintos: Comunidad Autónoma del País Vasco y Navarra, (otro día hablaremos sobre esta terminología tan desafortunada) ponen en marcha la maquinaria para demostrar al estado español que Navarra es una comunidad que no tiene nada que ver con lo vasco. Al principio no se lo creían ni ellos, tampoco sus seguidores; pero con el paso de los años, y el apoyo entusiasta del resto de formaciones políticas estatales y especialmente la prensa y televisión logran expandir la teoría de que Navarra no es vasca. De todas maneras no está mal recordar aquí el dicho que antes se coje al mentiroso que al cojo. Y en este caso así está ocurriendo. El Gobierno de Navarra y sus dirigentes no han escatimado medios para ocultar y enmarañar la realidad, hasta han hecho desaparecer el término Euskal Herria de los libros de texto, han intentado convertir los Sanfermines en la fiesta nacional española; sin embargo,  están muy lejos de los navarros nos traguemos el anzuelo.

Invito al lector que no conozca la realidad navarra a leer las citas escritas de cualquier historiador o visitante que ha recorrido nuestro territorio desde la época romana hasta hoy día, o todavía les propongo una forma más fácil y atractiva de contactar con la realidad navarra. No tienen más que preparar una excursión de unos días por nuestra tierra, a poder ser incluyendo Pamplona y luego visitar cualquier otra ciudad vasca, Bilbao, Vitoria, San Sebastián y sacar sus propias conclusiones.

UPN, y los partidos proestatales han borrado todos los símbolos vascos del mapa oficial, han intentado rechazar cualquier particularismo navarro que tenga relación con las costumbres antiguas. No lo han conseguido, ni lo conseguirán, pues no caen en la cuenta que hasta el mismo nombre de Navarra es vasco, que la bandera que tan orgullosamente ondean en los edificios oficiales es vasca, que hasta el patrón de esta tierra San Francisco Javier es vasco, -toda su familia fue encarcelada y asesinada- y también él tuvo que dejar su tierra tras la invasión castellana para salvar su vida. , y que toda su familia fue encarcelada o asesinada., por defender la independencia de Navarra frenta a los invasores castellanos.  

El callejón sin salida en que nos han metido Sanz, Barcina… apoyados por Jimenez, Lizarbe… es un suicidio, que les lleva a renegar de lo propio para enaltecer costumbres foráneas, que aparte de uniformar y equiparar lo que un día fue el estado vasco a cualquier provincia del estado, conlleva el empobrecimiento cultural de todo un pueblo, uno de los pueblos más antigüo y auténtico de todo Europa.

Que Navarra es vasca es evidente. Existen cientos de argumentos. He aquí alguno.   Navarra es el territorio del pueblo vascón, por lo tanto en Navarra desde épocas ancestrales es el territorio del vasco, y a pesar de las invasiones indoeuropeas, romanas, francas, castellanas… se ha mantenido la lengua vasca ¿De dónde se sacan entonces que no somos vascos?

La cartografía, (recogida recientemente en una publicación por Jose Maria Esparza), y los textos históricos no  dejan duda alguna. Desde Polibio, Estrabón, Ptolomeo, Picard en el códice calixtino (de moda hoy día por haber sido robado de la Catedral de Santiago), Marineo Sículo, Napoleón… (por citar alguno de los geógrafos, historiadores, lingüístas que nos visitaron)  al último historiador reconocen sin ambages a Navarra como vasca.

Hasta el momento de la guerra civil española los proyectos políticos, sociales, económicos y culturales navarros iban de la mano del resto de los territorios vascos. Federación de cajas vasconavarras, Ferrocarril vasconavarro, Universidad Vasca, Eusko Ikaskuntza, Euskaltzaindia, Estatuto vasco, y miles de ejemplos más.  La Diputación de Navarra, y los orgarnismos oficiales navarros se consideraban vascos, y en la mayor parte de los casos fueron los promotores de los proyectos conjuntos. Sin embargo, lejos se han quedado esos tiempos en que el vasquismo y la defensa de la cultura vasca era patrimonio de la derecha navarra. Hoy en día no sabemos por qué se han convertido en acérrimos detractores. Sin duda, la conservación del euskera y las costumbres vascas es lo que ha permitido mantener una identidad diferenciada del resto de los pueblos limítrofes durante siglos y siglos. Hoy sin embargo, la derecha pretende hacernos comulgar con que todo lo que tiene que ver con lo vasco es contrario a la identidad navarra. Oponiendo lo vasco a lo navarro. Cuando en realidad siempre ha sido lo mismo y nunca ha existido diferencia.

Cómo muiestra basta un botón, en este caso se trata de un documentos de 1931 escrito por los alcaldes de Amescoa Baja, Abarzuza, Eulate, Aranarache y Larraona, zona donde el euskera se perdió hace ya unos siglos, donde dejan clara la identidad vasca de esta zona. “Queremos los montañeses de hoy dirigirnos a todos los navarros… para que la que fue cuna de nuestra vieja monarquía pirinaica… somos todos hijos de un gran pueblo vasco, de que Navarra es la hermana mayor y la capitalidad. Hemos vuelto a tener a la vista los errorres históricos de nuestra tierra, con la separación en que hemos vivido navarros y vascongados, cuando no luchando unos contra otros, al servicio de los útimos reyes de Castilla contra la Independencia de Navarra. Si logramos ver publicado el Estatuto… lo habremos logrado todo, desde  la garantía de nuestra religiosa y foral, hasta la seguridad de nuestros intereses”.

Tampoco Europa entiende como los políticos navarros pueden decretar el exterminio de una de las lenguas más antiguas del continente. No se comprende cómo no se fomenta la conservación de un patrimonio cultural y lingüístico como el nuestro. Nosotros los criticamos y la historia los juzgará. No hace dos días UPN, PSN y PP se han unido para vetar la propuesta de que la zona no vascófona tuviera los mismos derechos lingüísticos que la zona mixta.

Gerardo Luzuriaga