25/03/2013
Juego de la pelota (III)
La afición por la pelota viene de antaño y se ha transmitido de padres a hijos. A nuestros padres les gustaba la pelota, cuando llegó la televisión fue de lo poco que nuestros padres disfrutaban de este invento.
Los frontones y la pelota ha supuesto mucho en nuestros pueblos. No hay más que ver alguno de los frontones de estos pueblos para hacerse una idea de la importancia que tenían en el pueblo. Espacio abierto con gradas de cemento para ver cómodamente los partidos. Partidos que se jugarían en domingo y días de guardar después de Misa. Partidos que eran seguidos por todo el pueblo y muchos de los habitantes de los pueblos de alrededor.
Desde niños los mocetes jugábamos al punto, cuando estábamos muchos, o cuando había un número no superior a seis organizábamos partidos y partidos... A veces coincidíamos varias generaciones, entonces no existía problema alguno, los mayores se adueñaban del juego de pelota y los más pequeños esperábamos horas hasta que nos llegaba el turno.
El frontón de Nazar está ubicado en un buen lugar, pues aunque Nazar está en cuesta, su ubicación es bastante idónea y aunque las pelotas cuando se salían del frontón corrian como locas por las cuestas abajo, se puede decir que el frontón está construido en una de las zonas más llanas del pueblo. Los partidos eran interminables, cuántas tardes enteras nos hemos pegado sudando la gota gorda.
Por norma general se jugaba a mano, llegó una época en que comenzamos a jugar a pala, con palas artesanas hechas por nosotros mismos. Alguna se parecía más a un palo un poco ancho que a lo que hoy conocemos como palas. De todas maneras muy pocas veces se jugaba a pala pues al no existir red perdíamos bastantes pelotas encaladas en los tejados o que iban cuesta abajo, acabando en el chorrón o en el camino de Mirafuentes y no estaba el horno para bollos.
En la actualidad, el frontón se sigue usando, en verano los niños y niñas se siguen pasando horas jugando, pero hoy día a lo que más se juega es al frontenis, con raquetas y pelotas de tenis.
G. L.
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