Ok

By continuing your visit to this site, you accept the use of cookies. These ensure the smooth running of our services. Learn more.

18/08/2005

Navarra de mis amores (I)

Con el permiso de ustedes, pacientes lectores, haré unas ciertas reflexiones sobre un tema un poco escabroso y en cierto modo hasta filosófico: el papel que tiene la historia en el devenir de cualquier pueblo, en este caso el navarro.

 

Antes de entrar en harina, expondré unas bases necesarias a tener en cuenta:

 

-         No existen principios.

-         Todo puede ser cambiado con el apoyo de la mayoría del pueblo.

 

Una vez vistos estos dos puntos, parto de la premisa para mi clara e indiscutible que Navarra es y ha sido vasca. Tan vasca como los demás territorios de Gipuzkoa, Bizkaia, Araba, o Iparralde.

 
  1. Navarra es Navarra, como Bizkaia es Bizkaia, La Rioja es La Rioja y a pesar de ello son también otras cosas.
 

Últimamente, especialmente estos últimos años, se está extendiendo, sin embargo, la idea de que Navarra es Navarra. Algunos políticos, articulistas con la intención de marear la perdiz  se engañan a ellos mismos repitiendo una y otra vez que Navarra es Navarra. Y se quedan tan anchos, como si hubiesen descubierto las Américas. –Cómo si las Américas no existiesen desde mucho antes de que fuesemos los españolitos con nuestras naves-

 

-         El ser navarro no está en contradicción con ser vasco.

-         Es más se es vasco porque se es navarro.

 

Ya sé que son argumentos de Perogrullo. ¿Pero qué vamos a hacer? Si oímos razonamientos de tres al cuarto, es necesario responder también con argumentos obvios.

 

Estaréis conmigo que todos habéis oído alguna vez lo de Navarra es Navarra y nada más. Es un argumento que usan y lo repiten una y otra vez co la intención de que a fuerza de repetir y repetir  vaya calando en la gente. Y además ya se sabe, los que repiten estos argumentos coinciden con los planteamientos del gobierno, con lo que la mayoría de la prensa se hace eco de estas ideas.

 

-         ¿Qué nos parecería si un cordobés, por ejemplo, dice que no es andaluz, que él es de Córdoba, cordobés de toda la vida y no es andaluz?

-         ¿Qué un ciudadano de Paris nos dice que él no es francés?

-         No le responderíamos que precisamente esos ciudadanos son andaluces y franceses justamente por ser de Córdoba y París?

-         Siguiendo con el mismo ejemplo, pero acercándolo un poco más a nuestra tierra. ¿Qué pensaríamos si uno de Nazar defiende que el no es navarro, que él es de Nazar? No le responderíamos todos que es precisamente navarro por ser de Nazar?

-         ¿Qué diríamos de un Guipuzcoano nacido en Tolosa que nos diga que él no es vasco?

-         ¿De donde viene entonces esa fantasmada de que uno es navarro y nada más? ¿Acaso ese mismo que dice que es sólo navarro, no dice con la boca abierta que es español?

 

Queramos o no primero se es de una familia, de una casa, luego precisamente por haber nacido en esa casa se pertenece a un barrio, por ser de ese barrio se pertenece a un pueblo, por ser de ese pueblo se es de un valle, ese valle pertenece a una comarca, esa comarca pertenece a una provincia, esa provincia pertenece a una Comunidad Autónoma, esa Comunidad Autónoma a una nación, esa nación a un continente y los continentes forman la tierra.

 

-         Los que defienden que un navarro es navarro y nada más se obcecan lo mismo que se obcecaría el que dijese que el es de Nazar y nada más.

 

Llegados a este punto tengo que decir, que todas las ideas son respetables. Y es más teniendo en cuenta el ejemplo que he puesto seguro que existe algún nazareno que no se siente más que de Nazar, y todo lo demás le da igual. Pero seguro que es la excepción.

 

Siguiendo con el ejemplo ¿Alguno piensa que los alaveses no se sienten alaveses? y a pesar de ello son vascos. ¿No? Es más justamente son vascos por ser alaveses.

 

Para terminar, según estos ejemplos podríamos decir que si los navarros no son vascos, los de Nazar no son navarros.

Concho un poco fuerte eso de que los de Nazar no somos navarros. ¿No? ¿Pues entonces que somos diría alguno? (Continuará)

Gerardo Luzuriaga Sánchez

 

Con el permiso de ustedes, pacientes lectores, haré unas ciertas reflexiones sobre un tema un poco escabroso y en cierto modo hasta filosófico: el papel que tiene la historia en el devenir de cualquier pueblo, en este caso el navarro.

 

Antes de entrar en harina, expondré unas bases necesarias a tener en cuenta:

 

-         No existen principios.

-         Todo puede ser cambiado con el apoyo de la mayoría del pueblo.

 

Una vez vistos estos dos puntos, parto de la premisa para mi clara e indiscutible que Navarra es y ha sido vasca. Tan vasca como los demás territorios de Gipuzkoa, Bizkaia, Araba, o Iparralde.

 
  1. Navarra es Navarra, como Bizkaia es Bizkaia, La Rioja es La Rioja y a pesar de ello son también otras cosas.
 

Últimamente, especialmente estos últimos años, se está extendiendo, sin embargo, la idea de que Navarra es Navarra. Algunos políticos, articulistas con la intención de marear la perdiz  se engañan a ellos mismos repitiendo una y otra vez que Navarra es Navarra. Y se quedan tan anchos, como si hubiesen descubierto las Américas. –Cómo si las Américas no existiesen desde mucho antes de que fuesemos los españolitos con nuestras naves-

 

-         El ser navarro no está en contradicción con ser vasco.

-         Es más se es vasco porque se es navarro.

 

Ya sé que son argumentos de Perogrullo. ¿Pero qué vamos a hacer? Si oímos razonamientos de tres al cuarto, es necesario responder también con argumentos obvios.

 

Estaréis conmigo que todos habéis oído alguna vez lo de Navarra es Navarra y nada más. Es un argumento que usan y lo repiten una y otra vez co la intención de que a fuerza de repetir y repetir  vaya calando en la gente. Y además ya se sabe, los que repiten estos argumentos coinciden con los planteamientos del gobierno, con lo que la mayoría de la prensa se hace eco de estas ideas.

 

-         ¿Qué nos parecería si un cordobés, por ejemplo, dice que no es andaluz, que él es de Córdoba, cordobés de toda la vida y no es andaluz?

-         ¿Qué un ciudadano de Paris nos dice que él no es francés?

-         No le responderíamos que precisamente esos ciudadanos son andaluces y franceses justamente por ser de Córdoba y París?

-         Siguiendo con el mismo ejemplo, pero acercándolo un poco más a nuestra tierra. ¿Qué pensaríamos si uno de Nazar defiende que el no es navarro, que él es de Nazar? No le responderíamos todos que es precisamente navarro por ser de Nazar?

-         ¿Qué diríamos de un Guipuzcoano nacido en Tolosa que nos diga que él no es vasco?

-         ¿De donde viene entonces esa fantasmada de que uno es navarro y nada más? ¿Acaso ese mismo que dice que es sólo navarro, no dice con la boca abierta que es español?

 

Queramos o no primero se es de una familia, de una casa, luego precisamente por haber nacido en esa casa se pertenece a un barrio, por ser de ese barrio se pertenece a un pueblo, por ser de ese pueblo se es de un valle, ese valle pertenece a una comarca, esa comarca pertenece a una provincia, esa provincia pertenece a una Comunidad Autónoma, esa Comunidad Autónoma a una nación, esa nación a un continente y los continentes forman la tierra.

 

-         Los que defienden que un navarro es navarro y nada más se obcecan lo mismo que se obcecaría el que dijese que el es de Nazar y nada más.

 

Llegados a este punto tengo que decir, que todas las ideas son respetables. Y es más teniendo en cuenta el ejemplo que he puesto seguro que existe algún nazareno que no se siente más que de Nazar, y todo lo demás le da igual. Pero seguro que es la excepción.

 

Siguiendo con el ejemplo ¿Alguno piensa que los alaveses no se sienten alaveses? y a pesar de ello son vascos. ¿No? Es más justamente son vascos por ser alaveses.

 

Para terminar, según estos ejemplos podríamos decir que si los navarros no son vascos, los de Nazar no son navarros.

Concho un poco fuerte eso de que los de Nazar no somos navarros. ¿No? ¿Pues entonces que somos diría alguno? (Continuará)

Gerardo Luzuriaga Sánchez

 

 

Los comentarios son cerrados