15/07/2015
Casi nadie tira piedras contra su tejado
Hace tiempo, años que no leía detenidamente el Diario, el Diario de Navarra, pero en un día señalado como el 7 de julio y después de pedir tres periódicos en un quiosco de Santander, y no tener ninguno de ellos me decidí a comprarlo.
Lo leí de arriba abajo, de pe a pa, no me sorprendió ni un ápice, lo mismo que hace 40 años, en su línea. Ataque furibundo a Grecia, golpes a diestro y siniestro a EH Bildu, y las fiestas de los pueblos navarros.
De todas maneras, lo que más me ha llamado la atención, y es por lo que escribo estas líneas ha sido una carta al director de Álvaro Sobejano de Pablo, presidente de las nuevas generaciones de Navarra.
Copio alguna de sus frases, con el objetivo de que entendáis mis comentarios. “el pasado 17 de junio el Parlamento de Navarra atravesó uno de los momentos más críticos desde el restablecimiento de la democracia en nuestra Comunidad”. Pues que se vaya armando de paciencia ya que por lo mínimo le quedan 4 largos años, que muy a bien seguro se le van a hacer muy largos.
“La irrupción de formaciones políticas de ideario estrambótico y procederes irreverentes derivó en una escenificación grotesca y escasamente constructiva”. Adjetivos bastante injustificados hacia formaciones emanadas de la voluntad popular.
Sin embargo, desde mi punto de vista lo más fuerte y fuera de lugar está todavía por llegar. El representante de las nuevas generaciones critica y protesta por el empleo de la lengua vasca en el Parlamento de Navarra. Lo dice así y con estas palabras: “el uso del euskera exteriorizó la voluntad segregadora de ciertas formaciones que, de nuevo, trataron de valerse de un instrumento de comunicación apartidista como es la lengua para excluir y relegar a los representantes de planteamientos discrepantes de sus postulados”. Cierto el euskera debe ser apartidista, es decir que no debe usarse políticamente, y todos los ciudadanos, partidos políticos tienen el mismo derecho de usarlo y ninguno puede apropiárselo como si fuese particular. Pero de ahí a valerse de ello, como hace el autor de dicha carta para criticar y atacar a los que lo usan es no entender de la misa la media.
Y sigue Álvaro Sobejano: “cuando el empleo del euskera se desvirtúa y no responde a una necesidad comunicativa, sino a una pretensión disruptiva (aislar premeditadamente a quienes no son capaces de acceder a tipología idiomática) con el objetivo de dividir a los asistentes e incluso proyectar enfrentarlos, surge un contencioso evitable”. Esto que es cierto y podría valer para los idiomas extranjeros, no se puede extrapolar a los idiomas propios de un pueblo.
¿Cómo se puede argumentar que tu propio idioma no responde a una necesidad comunicativa? En definitiva nos propone abandonar nuestro propio idioma hasta que todos los navarros lo conozcan ¿Y si alguno se niega?¿Qué hacemos el resto? ¿No lo usamos nunca?
El euskera es de todos, sí, y nadie puede ni debe apropiárselo; pero de ahí a que no se pueda emplear porque es de todos va un abismo. Pondré ejemplos, con ello tal vez, alguno lo vea un poco más claro. Aunque no existe mayor ciego que el que no quiere ver, por lo que nadie piense que intento convencer a los que piensen de otra forma, allá ellos.
Pensemos por ejemplo en una sociedad gastronómica de 100 socios, de ellos 20 ni se acercan, ni disfrutan de sus beneficios, pero son propietarios como el resto y pagan las cuotas como el resto. Pero en ningún caso ello les da pie ni tienen derecho a impedir al resto a que usen la sociedad. Sigo con otro ejemplo, es como si una casa que es propiedad de 6 hermanos, en la que todos tienen los mismos derechos, la casa es de todos por igual, lo lógico es que si necesita algún arreglo, alguna mejora se haga entre todos; pero si eso no es posible por las circunstancias que sean (que no la usen, que no tengan dinero, que no les dé la gana porque crean que está en muy buenas condiciones), eso no impide que si algún hermano quiere arreglar la casa por su cuenta lo haga.
Con la lengua vasca debería ser idéntico, y en ningún caso se debería criticar y condenar a los que lo emplean, a los que hacen porque se mantenga vivo y en las mejores condiciones un patrimonio cultural heredado de nuestros antepasados, que tal vez ellos no lo usarán (porque no lo conocen, porque no quieren); pero seguramente sí que sus hijos y sus nietos se beneficiarán de tal beneficio.
Todos nos deberíamos de alegrar de que haya hermanos que se preocupan por mantener en condiciones idóneas la casa familiar.
Alvaro Sobejano en su citada carta sigue erre que erre: “No abogamos en modo alguno por la supresión del euskera en el Parlamento”. Faltaría más, en estos momentos que abogase por ello, bastantes años ha estado prohibido y relegado. Sería antidemocrático y anticonstitucional, y como eso hoy día no puede ser, usan otros argumentos para que en realidad el euskera no se hable.
sigue con sus argumentos: “sino que condenamos la utilización interesada con fines excluyentes que de este se hace por parte de ciertos grupos allí representados”. En definitiva que no quiere su supresión pero condena su uso. Este argumento es viejo, lo vienen desarrollando los políticos vascos de la derecha durante estos últimos años, no están en contra de su supresión (porque no pueden), pero con otros argumentos intentan que en realidad se suprima y no se hable, en la mayoría de los casos además lo consiguen.
Y sigue: “El euskera debería ser adoptado (usado) por quienes realmente sientan que a través de él puedan expresar matices que no se puedan precisar en castellano”. ¡Toma ya! El euskera relegado a la anécdota. Y acaba: “La politización lingüística no es ni edificante ni procedente en un tiempo donde la prioridad ha de ser el diálogo y el entendimiento”. Lo que faltaba, echar la culpa a un idioma de falta de diálogo y entendimiento, y luego dicen que es apolítico y que es de todos.
Qué cuesta decir las cosas claras, y no andar con tanto rodeo. Lo que éste y los que piensan como éste, o por lo menos los que usan los mismos argumentos lo que quieren y pretenden es que la casa familiar desaparezca, que se hunda, que se caiga y se derruya. Y esto es lo que algunos no vamos a permitir nunca, aunque nos arruinemos en el intento…
Gerardo Luzuriaga
19:47 | Permalink | Comentarios (1)
Comentarios
Oso erantzun ona. Gezurra dirudi zer azal daukate... euskararen erabilera itotzeko, eta gainera argudioak ematen. Hori gertatzen zaigu, hezkuntz onekoak izateagatik, asko ikasi behar dugu, ispilua Katalunian daukagu... Besteak ez mintzeko beti irtetzen gara galtzaile... garaila ailegatu da gure balioak zaintzeko, haien artean preziatuena, hizkuntza.
Anotado por: Kepa | 16/07/2015
Los comentarios son cerrados